ALGUNOS EVENTOS ALLÁ ARRIBA... ALGUNAS REFLEXIONES AQUÍ ABAJO
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Cualquier parecido con la realidad argentina del momento...... NO es mera coincidencia.
Cada año ocurre dos veces, cada seis meses. Por un instante se da una proporción equivalente, 12 hs de luz y 12 hs de oscuridad para cada hemisferio del planeta.
Enseguida se vuelve a desequilibrar, pero en sentido inverso.
Eso indican los equinoccios, los dos puntos anuales más significativos del Zodíaco ...
¿qué otras reflexiones nos pueden inspirar?
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Síntesis cíclica (equinoccio libriano, Luna Nueva y fase menguante del ciclo de relación Neptuno-Marte). Aplicado a la carta de la Argentina, junto con otros de sus tránsitos.
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Luna llena en Aries, del mes de Libra (con eclipse total):
el miércoles 8 de octubre a las 7:56 am (hora argentina).
Luna nueva en el arranque de Escorpio (con eclipse parcial):
el jueves de octubre a las 18:58 (hora argentina).
el miércoles 8 de octubre a las 7:56 am (hora argentina).
Luna nueva en el arranque de Escorpio (con eclipse parcial):
el jueves de octubre a las 18:58 (hora argentina).
No miro a los eclipses como eventos maléficos -ni mucho menos- pero tratándose de “ocultamientos”, corresponde situarnos en el desafío que siempre implican estos tránsitos para las meditaciones psico-astrológicas. Quizá sean, dos veces por año, momentos cruciales para enfrentar los contenidos oscuros del inconsciente.
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El estilo de estos relatos "linkeados", como es habitual en este blog, no muestra cadencias científicas rigurosas en los aportes astronómicos. No sólo porque no es mi especialidad, sino además por un propósito explícito: es el estilo que uso en mis clases para hacer que los astrólogos se interesen un poco más en los movimientos del sistema solar. Para que no sientan el tema como algo cuya comprensión se les escapa. O que "no les interesa porque son astrólogos humanistas y lo único que cuenta es cómo resuena en mi interior", expresión que a veces recuerda la fábula de Esopo sobre la zorra y las uvas.
Sigo insistiendo en que, si la astrología tocó nuestras vidas, es necesario asomarse a sus aportes específicos: la lectura e interpretación de los ritmos estelares. Pero opino que es necesario hacerlo al mismo tiempo que ahondamos en nuestros psiquismos inmaduros, polarizados, asustados.
Si sólo quedáramos en esta segunda tarea -un malentendido de tantos astrólogos denominados "humanistas"- la astrología sería meramente una psicología mejorada. Indudablemente lo es: por algo tan alta cantidad de psicólogos e incluso psicoanalistas de mentes abiertas, vienen abrevando crecientemente en nuestras clases, en las que probablemente fueron encontrando un marco más amplio e incluyente para sus lecturas. Me refiero a las clases que dan / damos tantos astrólogos en la Argentina, formados en lo que me gusta llamar, con agradecimiento y justicia, la "raíz Casa XI".
En el extremo opuesto, si la mirada astrológica no reconoce la parcialidad psicológica de quienes la abordan, aprenden y difunden, en mi opinión se la vuelve a amputar. En este caso, a través del supuesto de una mirada objetiva que termina por ensombrecer, simplificar en exceso y dogmatizar toda lectura.
Por eso me gusta recordar, tanto en el consultorio como en las clases, que "la astrología en nosotros" siempre va por más... Para constatarlo, nada mejor que dedicarnos un poco al pulso Yin /Yang de esta etapa libriana: y dialogar con la coreografía celeste, por definición amplia e incluyente de la terrestre, incluida y a la vez condicionada.
Respecto del Cielo en esta primera mitad del mes de Libra, varios eventos del sistema solar al que pertenecemos nos están permitiendo ritualizar -a distintos grupos de estudio y exploración- invocando/convocando las cualidades que estos momentos expresan.
Respecto de la Tierra, diferentes acontecimientos de la política internacional y nacional, reflejan el impacto y el "diálogo" -aún empastado y apenas audible- entre los condicionamientos político-económicos del mundo y del país y esa coreografía celeste.
Y luego -en un círculo aún más incluido y por ende aún más condicionado- nuestras respectivas vidas personales y nuestros vínculos cotidianos nos presentan desafíos crecientes.
Vengo compartiendo esta ejercitación en los diferentes grupos en red que integro, en algunos como coordinadora, en otros como participante. La propuesta es compartir ahora por escrito, con otros/otras, esta hermosa y alquímica actividad desplegada durante las últimas semanas.
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Los links que puse arriba reflejan varios de los temas antes mencionados. Cada uno es un artículo de cierta extensión, por lo que sugiero leerlos por tandas y con algo de tiempo disponible.
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